La expectación era máxima. Todos estábamos esperando lo que parecía que iba a ser la imagen del día y el mundo de la palabrería y los rumores encendían su maquinaria desde esta mañana y es que todo apuntaba a que Megan Markle y el príncipe Harry volverían a aparecer delante de las cámaras con motivo de la gala de los premisos Endeavour, que premian el trabajo de los militares veteranos heridos durante un servicio. Y tras horas esperando las imágenes, por fin, Meghan y Harry han aparecido en Londres y el mundo enloquecía con los duques de Sussex.
Las imágenes de esta reaparición en suelo británico quedarán para la Historia de los Duques de Sussex. Dos estrellas, más de cine que de la realeza, que posan ante los fotógrafos. Claro que lo que más nos ha sorprendido ha sido cómo Meghan Markle ha arriesgado con su estilismo desafiando la lluvia de la capital británica con un espectacular vestido midi de cuello redondo, mangas cortas y falda de tubo hasta las rodillas de Victoria Beckham que nos ha conquistado por su atrevido color azul cielo con el que la duquesa de Sussex iba verdaderamente guapa.
Meghan completaba su look con unos zapatos azul marino modelo BB Tora de Manolo Blahnik y clutch a juego, modelo Lucia, de Stella McCartney.
El vestido está disponible en la web de la diseñadora. Barato no es. Cuesta 1.120 euros. El vestido ‘camiseta’, como se describe en la página, busca la sencillez y las líneas depuradas. Meghan Markle lo ha combinado con unos sencillos ‘stilletos’ oscuros y un ‘clutch’ oscuro con betas azuladas a juego. El pelo, recogido en una coleta y unos pendientes de aro pequeño de oro han completado un estilismo impecable.