La Paris Fashion Week dio comienzo el pasado 28 de septiembre y tendremos días llenos de pasarelas y espectáculos hasta el día 6 de octubre. Aunque no nos podemos quejar, ya que nuestros ojos están absorbiendo muchísima moda desde que comenzó la semana de la moda en Milán. Sin embargo, nosotras no tenemos suficiente, queremos más tendencias y más estilo. Por eso hoy os damos una vuelta por los primeros días de la Paris Fashion Week.
Mame Kurogouchi
Mame Kurogouchi dio el pistoletazo de salida a la Paris Fashion Week con su colección “Embracing” (abrazando) en la Facultad de Farmacia de París. Continuando con su temporada pasada, Kurogouchi presentó prendas de punto que recordaban a las tradicionales cestas tejidas. Asimismo, la paleta de colores fue profunda y cálida con tonos semejantes a las hojas caídas. Las siluetas con los hombros caídos y mangas largas y fluidas eran muy características de la marca, pero también se añadieron minifaldas y vestidos.
En cuanto al calzado tuvieron tres protagonistas: los zapatos de encaje, las botas a la altura del tobillo y las sandalias con un bordado tradicional japonés (kogin zashi). Estas últimas fueron creadas en la colaboración que realizaron con Tod’s esta temporada.
Wales Bonner
Wales Bonner es una de las marcas masculinas británicas más talentosas actualmente. Su objetivo es crear una conexión entre sus antepasados del Caribe y de África y potenciarla con la costura occidental.
La colección titulada “Thinkin Home” (Hogar del pensamiento) estuvo inspirada en el clásico The Harder They Come y pudimos ver desde esmóquines con chaqueta de béisbol hasta perfectas combinaciones de camisas de jockey y bombachos de punto.
Situationist
Sobre las calles, los mercados y las tiendas de segunda mano, la colección de Situationist mostró sus trajes femeninos de satén lilas y sus trajes masculinos rojos de poeta del rock. Esta colección fue sin duda una ingeniosa muestra de talento con un corte retro futurista, dobladillos de 45 grados y extrañas solapas y cuellos.
Cecilie Bahnsen
Cecilie Bahnsen siempre ha sido conocida por sus románticas y voluminosas siluetas de vestido. Sin embargo, ha comenzado un cambio y en esta semana de la moda de París hemos podido ver minivestidos de plumas de avestruz atadas a mano en blanco, negro y rosa, y vestidos de seda diseñados con una técnica de smocking elástico que los hacía esponjosos.
No obstante, uno de sus diseños estrella fue el diseño de un nuevo traje. Bahnsen dio un giro a la sastrería clásica con una blazer y un pantalón blanco de tejido jacquar que nos ha encantado a todos. Además de su vestido sin mangas de organza sobre un simple traje negro, consiguiendo fusionar la sensibilidad con piezas más estructuradas.
Marine Serre
Marine Serre nos dejó a todos boquiabiertos con un maravillo vídeo grabado entre nubes gigantes de niebla y con muchos personajes de sexo indeterminado. Muchas veces hemos oído que Serre crea una postapocalíptica, y esta vez podríamos decir que nos ha mostrado un mundo donde el calentamiento global ha seguido su curso brutalmente.
Sus conceptos de supervivencia chic son un popurrí de joyas funky étnica y punk, y su figura más destacada es la luna, la cual vimos en durante todo el clip. En cuanto a las telas, la clásica tela vaquera ha sido renovada a través de un grabado láser del patrón de la “piel de pez luna”.
Coperni
Coperni fue el primer desfile en vivo de la Paris Fashion Week y se expuso en la azotea de La Tour Montparnasse. Aunque el tiempo no estaba muy de su lado
No obstante, pudimos disfrutar de una colección pulida, protectora e impactante. Los diseñadores se inspiraron en la protección actual que debemos tener con las mascarillas, por ello han creado prendas que protejan a las mujeres. La colección resaltó por su conjunto ecuestre inglés totalmente blanco de chaqueta con pantalones de montar elásticos.
Christian Dior
Christian Dior presentó una colección donde combinaba lo deseable con lo llevable. Situados en el Jardín de las Tullerías, Dior nos mostró chaquetas abombadas en vestidos, camisas alargadas como túnicas y pantalones muy anchos.
La marca buscaba una nueva figura, ya que han considerado que la nueva realidad es más básica y no tan rígida como siempre lo ha sido. Buscan realzar la silueta con una nueva medida y una cómoda sensibilidad.
Koché
Koché triunfó con su combinación de ropa deportiva con la alta costura francesa. La pasarela se ubicó en el interior del encantador Buttes-Chaumont, un fantástico parque en el noroeste de París.
Los diseños masculinos se basaron en pantalones cortos de bowling de tela vaquera teñida, sandalias a juego y chaquetas con estampado floral. Y los diseños femeninos contenían vestidos de tirantes a rayas o en tela vaquera, sujetadores étnicos y culottes con encaje.
La pasarela terminó con el elenco caminando con pancartas donde podíamos leer “Ama a la madre naturaleza hasta que venga” o “Los parques son cultura, mejores parques, mejor cultura”, mientras de fondo sonaba “Aleluya” de Leonard Cohen.